Esta mañana escuchaba uno de esos casetes que atesoro como si fueran oro puro. Uno de mis predicadores favoritos y mi pastor por algun tiempo me recordaba nuevamente sobre la verdadera prosperidad. Hablaba sobre los principios que hace años aprendi; y al escucharlo, tuve que reconocer con asombro que algunas cosas tan importantes y fundamentales en mi vida casi las habia olvidado.
Casi habia olvidado...
Que el agricultor sale a sembrar pero ora a Dios para que haya lluvia y cosecha.
Que en vano se trbaja si el Señor no edifica la casa.
Que es El quien sustenta todas las cosas.
Casi había olvidado...
Que puedo comprar una cama pero no paz...
Que puedo comprar jueguetes pero no el corazon de mis hijos...
Que puedo comprar una casa pero no un hogar...
Casi había olvidado...
Que tengo tanta bendición gracias a su amor.
Que el principio de la sabiduría es el temor de Jehova.
Que El es el principio y fin de todas las cosas.
De que me afano entonces ?...
1 comentario:
Que belleza Edwin:
Te felicito y me regocijo mucho al ver como con tus palabras das a conocer tu corazón, tienes el corazón de un hombre valeroso,virtuoso,y sabio y me da gusto ver que desde que el Señor te puso en sus manos te has dejado trabajar como el quiera pues se nota que nuestro Señor ha estado haciendo maravillas en tu vida.
Eso me llena de felicidad al ver como creces y te engrandeces más cada día....
y en efecto podemos comprar varias cosas pero algo que no lo compra nada es la paz, el amor y la gloria que Dios por su infinita bondad nos regala cada día ese ragalo no tiene precio asi como no tiene precio el conocerlo a él y dejarlo que entre en nuestro corazón.
Deseo que Dios te siga llenando de sabiduria para todas sus obras .
SIGUE ENGRANDECIENDOTE EN LA GLORIA DEL SEÑOR.
BENDICIONES..........
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